Ortografía y autoedición
En mi opinión suele haber un problema entre ortografía y autoedición. He leído valoraciones contrarias basadas en que un autor cuida su libro al máximo y digo que: Por supuesto. Sin embargo eso no significa que un autor sea experto en cualquier asunto y, no nos engañemos, la RAE no lo pone nada fácil. Las normas ortográficas cambian a menudo, y muchas de ellas son realmente inconsistentes y contradictorias. El autor puede decidir una voluntaria rebeldía; no sería el primero. Pero hay que saber mucho para ser un buen rebelde.
¿Quién no tiene dudas con la ortografía? ¿Quién lo sabe todo? Yo no. Yo tengo muchas dudas ortográficas y gramaticales aunque sé qué cosas me faltan. Sobre todo, sé qué es lo que tengo que consultar y dónde encontrar la respuesta. Esto es lo que puedo ofrecerte: Señalar los puntos críticos y buscar las soluciones que yo mismo no conozca.
Nuevas normas ortográficas.
Periódicamente, la Real Academia Española impulsa cambios ortográficos. Hubo una lista extensa en 2010 y nuevas normas en 2015 también. Siempre son polémicas. La RAE lleva unos años con una tendencia a hacer sencilla esta parte de la escritura, lo cual conduce a otros conflictos. A mí me gusta escribir según las normas anteriores a 2010. Será nostalgia. En eso mi espíritu es libre y puedes elegir las normas que prefieras. Simplemente, dímelo.
Corrección ortográfica.
Opino que la escritura existe para hacerse entender por escrito, por lo que las normas ortográficas están al servicio del escritor y del lector. Por eso no soy obsesivo con ellas siempre que cumplamos el objetivo, pero si iniciamos un camino es conveniente mantenerlo. No volvamos loco al lector. Si lo deseas puedo ayudarte con esto también. Ortografía y autoedición son compatibles, pero trabajando el asunto.
Por cierto, no te fíes de los correctores de los programas de proceso de texto; no son inteligencia artificial.
Si quieres que nos conozcamos, contacta.